BIBLIÁN CELEBRA 131 AÑOS DE ENTRONIZACIÓN DE LA VIRGEN DEL ROCÍO EN LA COLINA DEL ZHALAO

El lunes 20 de enero de 2025, Biblián conmemoró con fervor los 131 años de la entronización de la Virgen del Rocío en la colina del Zhalao, un hito religioso que une al pueblo en una tradición de fe y devoción.

La Parroquia Eclesiástica San José de Biblián, con el apoyo del GAD Municipal, el Cuerpo de Bomberos y otras instituciones, organizó una serie de actividades en honor a este acontecimiento significativo.

La historia se remonta a 1893, cuando una fuerte sequía azotó el sur del país, causando gran sufrimiento. En respuesta a esta calamidad, el párroco de la época, Daniel Muñoz, tomó una pequeña imagen de la Virgen y, junto a los feligreses, ascendió al cerro del Zhalao, donde la entronizó en una oquedad en la roca. Milagrosamente, poco después, la lluvia comenzó a caer, de ahí la denominación de Virgen del Rocío.

En memoria de este hecho, los fieles se congregaron desde las 09:00 en la Av. Verdeloma, a la altura de la escuela Daniel Muñoz, para participar en la solemne procesión, presidida por el párroco del cantón y rector del Santuario, padre Jorge Escobar, acompañado de la alcaldesa Amelia Idrovo, los concejales y otras autoridades.

El recorrido avanzó por la calle Mariscal Sucre hasta los bajos del GAD Municipal, donde se levantó un altar en honor a la “Alcaldesa Perpetua de Biblián” como también se la conoce a la Virgen, seguido de una serenata ofrecida por la Rondalla Infanto-Juvenil, impulsada por el GAD Municipal y la Casa de la Cultura Extensión Biblián para personas con discapacidad.

La procesión continuó por las avenidas Daniel Muñoz, Francisco Calderón y El Rocío, hasta llegar al Santuario. A las 11:00 se celebró la misa solemne, presidida por Monseñor Oswaldo Vintimilla, obispo de la Diócesis de Azogues, acompañado de sacerdotes de la provincia.

El padre Jorge Escobar agradeció a los fieles por su participación, reconociendo el esfuerzo de las comunidades, barrios, organizaciones y entidades, lo que reafirma a Biblián como un pueblo mariano.

Por su parte, la alcaldesa Amelia Idrovo destacó que la devoción a la Virgen del Rocío trasciende lo religioso, “es un legado que preservamos con orgullo y amor, pues en cada gesto reafirmamos nuestra identidad”, dijo